El dolor de cabeza es un problema de salud muy incapacitante. Aquellos que lo sufren o lo han sufrido en algún momento, lo reconocen como algo de lo que se quieren librar cuanto antes.
En este blog hablo mucho sobre ejercicio y postura. Pero, «¿qué tiene que que ver la postura con los dolores de cabeza?» te preguntarás.
Los avisos que tu cuerpo lanza.
Todos los dolores que sentimos en algún momento son señales que nuestro cuerpo nos está enviando porque hay algún problema. Son las luces que aparecen en el panel de control del coche. No quiere decir que algo se haya roto pero sí quieren llamar nuestra atención hacia un punto concreto que puede estar sobrecargado o mal alineado, por ejemplo.
Cuando sientes dolor, es la forma que tu cuerpo tiene de avisartede que deberías hacer más ejercicio o que todas las horas que pasas sentado en el ordenador están anquilosando tus caderas, por ejemplo.
Quizá es tu rodilla la que quiere avisarte de que tu pie apunta hacia afuera cuando vas a correr por las tardes y se está produciendo un desgaste anormal en el cartílago por culpa de ello.
En el caso de hoy, al llegar a casa por la noche, con un dolor de cabeza, tu cuerpo está tratando de que te des cuenta de algo. Puede que sea que has olvidado beber agua durante todo el día y que estás deshidratado. O que has estado todo el día trabajando sentado, en una postura horrible, con la cabeza colgando del cuello. Este puede ser el responsable de ese dolor de cabeza que no te deja ni pensar.
Y ¿qué hago ahora?
Como en cualquier tema, el primer paso para abordar el problema tiene que ser analizarlo. Párate, sé consciente de esa molestia y empieza a analizar el por qué desde el punto de vista de tu estructura corporal.
Te duele la cabeza. Deja de hacer lo que estás haciendo. Imagina que estás corriendo, metes el pie en un agujero y tu tobillo se dobla dolorosamente. ¿Qué haces? Parar. Eso es lo primero, tu cuerpo te ha dado una señal, el dolor. Esto te indica que si sigues corriendo el daño será mayor. Pues cuando tengas un dolor de cabeza, para.
Asómate a un espejo y echa un vistazo a la posición de tu cuerpo. Quizá uno de tus hombros está más alto que el otro o la curvatura de tu cuello hacia adelante es demasiado pronunciada y está provocando que el conjunto de los hombros y la cabeza tenga un aspecto redondeado. Puede que sea tu zona lumbar la que ha perdido su curva natural y tu pelvis se encuentre desequilibrada. Es muy importante que observes con detenimiento todas esas señales visuales que tu cuerpo te manda. Son pistas que te marcan el camino a seguir.
Lo siguiente es escuchar tu propia intuición. ¿Qué te dice? No es normal que el cuello te tire y lo notes molesto cuando llevas la cabeza hacia atrás, ¿verdad?
¿Cuál es la explicación para el dolor de cabeza que se relaciona con la postura?
Algunos dolores de cabeza tienen su origen en la excesiva tensión muscular que tienen que soportar los músculos de la parte superior de la columna, especialmente los trapecios. La causa habitual de esto es esa postura de cabeza adelantada de la que hemos hablado más veces en este blog, con los hombros redondeados y una excesiva flexión torácica.
Los músculos que aguantan la cabeza tienen que trabajar muchopara mantenerla erguida en contra de las fuerzas de la gravedad. Cuanto más adelantada esté la cabeza, más fuerza deberán ejercer estos músculos. Esta tensión añade presión en los nervios y vasos sanguíneos que van y vienen del cerebro.
Estos músculos tan tensos producen una disminución del flujo de sangre, con la consecuente reducción de aporte de oxígeno y nutrientes a las células cerebrales. Además, al pasar tiempo en esa postura, el patrón respiratorio se vuelve ineficaz y se disminuye la entrada de oxígeno al cuerpo.
Si tomas conciencia de esos mensajes que tu cuerpo te envía, será más sencillo hacerles caso y poner remedio. Tener mejor postura puede suponer reducir el dolor de cabeza y, consecuentemente, disminuir la ingesta de analgésicos reduciendo los riesgos de posibles efectos secundarios.
Muy buen trato y buen masaje, volvere sin duda